A veces los recuerdo,
a veces también los pienso.
A veces los reclamo,
a veces los agradezco,
pero siempre aprendo de ellos,
nunca los desprecio.
¿Que si los echo de menos...?
Eso ya no lo creo...
bueno, pues hoy, hasta escribo de ellos,
de mis amores chilenos.
De mis damas chilenas...
Mariposas con alas de hada
sin recorrido en mi vida.
Dulces besos de princesas
a un plebeyo que dormía.
Ese canto caluroso,
esos brazos insaciables,
esas voces tan amables,
de mis amores chilenos.
Esas sábanas revoltosas...
ese aroma a mermelada.
Ese vino fermentado
por el calor de las mañanas.
Amores de lujuria, de pasión,
de tristeza, de ilusión,
de ternura, de traición.
Amores de un momento
y otros de larga duración.
Sin sabores de labios
ni delicias del cuerpo,
hoy sólo quedan recuerdos
de mis amores chilenos.
De mis damas chilenas...
a veces también los pienso.
A veces los reclamo,
a veces los agradezco,
pero siempre aprendo de ellos,
nunca los desprecio.
¿Que si los echo de menos...?
Eso ya no lo creo...
bueno, pues hoy, hasta escribo de ellos,
de mis amores chilenos.
De mis damas chilenas...
Mariposas con alas de hada
sin recorrido en mi vida.
Dulces besos de princesas
a un plebeyo que dormía.
Ese canto caluroso,
esos brazos insaciables,
esas voces tan amables,
de mis amores chilenos.
Esas sábanas revoltosas...
ese aroma a mermelada.
Ese vino fermentado
por el calor de las mañanas.
Amores de lujuria, de pasión,
de tristeza, de ilusión,
de ternura, de traición.
Amores de un momento
y otros de larga duración.
Sin sabores de labios
ni delicias del cuerpo,
hoy sólo quedan recuerdos
de mis amores chilenos.
De mis damas chilenas...
Jean Machuca
No hay comentarios:
Publicar un comentario