Pasan los años y no te veo crecer,
pasan los días de triste felicidad que yo disfruto
y en cada uno de ellos desearía poder darte un abrazo
Ocupan espacio en mi vista los autos que pasan
A veces me imagino que dentro de alguno irás tú.
Avanza la gente que cruza los parques y las plazas
Acaecen las tardes infinitas de niños que juegan
Pasan los años pero yo no lo quiero creer
Se ocultan de mi las bondades de la vida,
al no poder hacerle un regalo a mi simiente.
No se puede negar lo que nunca se ha afirmado
La lluvia no cae sobre mi
ni me moja con su manto delgado
Otro es quien disfruta de mi paternidad
Otra es la verdad que te cuenta tu familia
Otra es la crueldad dueña de mi desdicha
Pasan distantes los ojos de tu madre
Crecen las rozas blancas alrededor de tu foto
Se llenan de dudas sus ojos cuando mira los albores
Pasan los años y se acaba el tiempo para renacer
Se deshacen los lazos que nos unen
Se deshojan los árboles y no te vuelvo a ver
Se agota nuestro tiempo de recuerdos
apagándose la llama sin que comience a arder
Se acaban mis oportunidades de poderte querer
De hacer que veas en mi mirada tu reflejo
Pasan distantes los años del saber
Crecen los nietos del otro sujeto
Se une la nuera a la familia sin que yo la conozca
Escucho un susurro y un canto ajeno al oído
que hablan de las aventuras de un padre y su hijo.
Otro padre, otro hijo, porque yo nunca tendré al mío.
Jean Machuca
No hay comentarios:
Publicar un comentario